No quiero ser princesa

Querido Disney:

Después de mucho meditar, acabo de llegar a la conclusión de que esto no es para mi, se que te mande miles de cartas rogándote por ser princesa, pero eso fue mucho tiempo atrás, ya he cambiado de parecer, así que aquí te mando la corona para que se la guardes a una que quiera ocupar mi lugar y una pequeña lista en la que trato de explicar mi reciente decisión.

No quiero estar siempre en vestidos largos y cantando con los pajaritos, prefiero usar mis jeans y tararear un rock nd roll, ni creas tampoco que tengo planes de ser una cenicienta, no le aguantare rabietas a ninguna niña malcriada o a una madrastra con complejo de dragon. Tengo cosas más productivas que hacer en vez de ir a recoger flores y peinarme media hora frente al espejo. Tampoco tengo planes de al igual que Ariel cambiar lo que soy por alguien que tal vez no lo valore y que ni te pase por la mente correr el riesgo de dormir el sueño eterno esperando que un desconocido que se hace llamar “príncipe” venga y me despierte con un beso. Y explícame eso de que tengo que estar cocinando casi todo el día!? Por algo hay muy buenos restaurantes y se inventaron los deliverys, lamento decirte que tampoco estoy de acuerdo con eso de los sapos, como así!?! De verdad piensas que besare uno, prefiero morder la manzana envenenada y eso es otro tema que por respeto a Blanca nieves ni voy a comentar. Y ni hablar de la rapidez con que todo pasa, todavía sigo sin entender como alguien se puede enamorar en 3 días y casarse a la semana siguiente, prefiero tomarme mi tiempo, hacer las cosas sin prisa, sin tener que preocuparme que una bruja malvada me quiera encerrar en un castillo por que simplemente no soporte verme brillar.

Es tentador el espíritu libre de Pocahontas y la seguridad de Jasmin, pero eso lo puedo conseguir sin la corona.

Aun tengo en las manos el ticket rojo de Bono que me mandaste donde se puede leer en letras doradas: el paquete incluye un príncipe encantador. Pero sabes una cosa? Te devuelvo eso también, el mío llegara cuando tenga que llegar, entiendo que buscarlo por mi cuenta será mas difícil, hay lobos y ogros en el camino que se disfrazaran del señor perfecto solo para comerme, pero prometo no ser como caperucita y no compartir la misma sala con un animal feroz.

En fin, gracias por la oferta, pero yo paso, ya no quiero ser princesa.

Ivanna-